Horario de sueño del recién nacido
He aquí algunas estrategias para ayudar a tu pequeño a desarrollar su ritmo circadiano:
- Asegúrate de que alimentas a tu bebé con frecuencia a lo largo del día. Los libros de texto dicen que los bebés recién nacidos deben alimentarse al menos cada tres o cuatro horas, pero puedes intentar hacerlo cada dos horas a lo largo del día. Tener más periodos de vigilia durante el día puede ser útil para conseguir un sueño más consolidado durante la noche.
- Cuando empieces el día, abre las persianas para que entre luz natural en los ojos de tu bebé: esto indica al cerebro que es de día. Sal a dar un pequeño paseo o queda con un amigo en un patio para que te dé el sol. Haz que tu bebé forme parte de tus rutinas diurnas; las interacciones, las visitas y el tiempo al aire libre pueden ser muy útiles para establecer el ritmo de tu bebé.
- Reduce la estimulación y la luz (especialmente la luz de espectro azul/verde de los aparatos electrónicos) por la noche. Hacia las 8 de la tarde, cierra las persianas, atenúa las luces y mantén la actividad al mínimo. Durante la noche, intenta que la alimentación sea tranquila y con interacciones mínimas, es decir, ¡nada de largas conversaciones sobre el sentido profundo de la vida con tu bebé! También te sugerimos que utilices una luz tenue con un tono amarillo, naranja o rojo. Esta rutina ayudará a tu bebé a aprender que la noche es para dormir y no para jugar.
Los recién nacidos no sólo tienen ritmos circadianos no desarrollados, sino que también duermen de forma diferente a los bebés mayores o a los adultos.
Cuando los adultos duermen, pasan por ciclos de sueño que van de ligero a profundo y luego a sueño de movimientos oculares rápidos (REM), que es cuando se produce se sueña. Los adultos también pierden tono muscular durante esta fase y entran en un estado de ligera parálisis, ¡para evitar que "actúes" todo lo que ocurre en tus sueños! Por otra parte, los bebés NO pierden tono muscular durante el sueño REM y, de hecho, se vuelven increíblemente activos y ruidosos durante esta etapa.
Los bebés comienzan su ciclo de sueño en la fase REM y pueden agitarse, retorcerse, patalear o incluso llorar. Puede parecer que están despiertos y/o inquietos. Esto puede ser muy difícil para los padres primerizos, porque no sabemos si tenemos que responder o no, pero ten por seguro que es un sueño muy normal para un recién nacido.
Los bebés también pasan una mayor parte de su ciclo de sueño en fase REM en comparación con los adultos: hasta un 50%. El ciclo de sueño típico de un recién nacido es deunos 50 - 55 minutos, y durante ese tiempo unos 30 minutos de sueño activo (REM) y unos 20 minutos de sueño tranquilo. Durante el sueño tranquilo, los bebés tienen una respiración rítmica y parecen tranquilos. Esta etapa puede ser tranquila también para los padres, acostumbrados a que a que hagan mucho ruido!.
Ahora puedes entender por qué muchos padres, quizá tú también, sienten que sus bebés suelen tener un sueño ligero y errático. A menudo los padres pueden confundir la inquietud REM con un despertar completo e intentar interactuar o calmar a su bebé durante este periodo. Por desgracia, podrías estar despertarlo accidentalmente. Comprender que los bebés pasan por estas fases activas del sueño puede ayudarnos a evitar intervenir rápidamente cuando no nos necesitan. Si observamos y esperamos a ver si tu bebé puede calmarse sin intervenir, puede que vuelva a dormirse solo. Esto también ayuda a desarrollar hermosas habilidades de autocalmado a medida que envejecen.
¿Cuánto tiempo debe estar despierto mi recién nacido?
Algo sorprendente que muchos padres desconocen es que los recién nacidos sólo deben estar despiertos durante breves periodos de tiempo. Algunos bebés tienen temperamentos que les impide dormirse cuando tienen sueño, y si no les damos el tiempo suficiente, pueden cansarse demasiado.
Cuando un bebé permanece despierto más tiempo del debido, su cuerpo empieza a producir adrenalina y cortisol, que equivalen a nuestras hormonas de lucha, huida o congelación. El aumento de estas hormonas hace que los bebés se resistan a dormirse. Una vez que concilian el sueño, es más probable que el bebé permanezca en sueño REM (activo), posiblemente despertándose con más frecuencia.
Esto es una guía: vigila siempre a tu bebé para detectar señales de sueño:
- 0-12 semanas: 45-60 minutos
- 3 meses: 1-1,5 horas
- 4 meses: 1,5-2 horas
- 5-7 meses: 2-3 horas
- 8-14 meses: 3-4 horas
Siempre es importante vigilar a tu bebé para detectar señales de sueño.
Si tu bebé se frota los ojos, se enrojece alrededor de los ojos, se pone inquieto, bosteza, se tira de las orejas y/o se frota la cara contra tu hombro, puede ser un buen momento para acostarlo. Si presionas a tu bebé más allá de su hora natural de sueño, puede que se anime y despeje durante un rato. Cuando sus hormonas de lucha aumentan es muy difícil acostarlo.
El momento de acostarse es muy importante para un recién nacido.
La mayoría de las veces, intentamos acostar a un bebé de menos de 12 semanas a una hora demasiado temprana. Recuerda que la melatonina y los ritmos circadianos de tu bebé aún no están completamente desarrollados y, por tanto, no están listos para acostarse a las 18.00 - 20.00 horas. Es muy habitual que un recién nacido duerma su última siesta sobre las 19.00 u 20.00 horas y que intente acostarse entre las 21.00 y las 22.00 horas. Desde la última siesta hasta la hora de acostarse, deberás procurar que transcurran 60 minutos, lo que incluirá la rutina de acostarse (unos 20 minutos).
Naturalmente, la hora de acostarse se adelantará a medida que tu hijo crezca. Puedes facilitar esta transición cerrando las persianas por la noche, utilizando luz suave en casa (tonos amarillos, naranjas, rojos) y asegurándote de que tu dulce bebé esté expuesto a mucha luz natural por la mañana temprano. Esto ayuda a ajustar el reloj interno y los niveles de melatonina. Es probable que notes que tu bebé está preparado para acostarse antes cuando empiece a dormir la siesta durante largos periodos a primera hora de la noche.
Si tu bebé está muy inquieto por la noche, pasa los primeros 30 minutos despierto dándole de comer o en un portabebés con mucho contacto, y después empieza la rutina de acostarse.
Sobre nuestro invitado en el blog:
Marina autora de este esclarecedor artículo, es enfermera titulada, experta en recién nacidos y entrenadora del sueño en Manchester (Reino Unido). Ofrece apoyo cualificado basado en objetivos específicos de crianza, ayudando a las familias a resolver sus problemas de sueño.
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